A raíz de algunos incidentes que pusieron en riesgo la seguridad de los pasajeros, el consejo General de la Autoridad del Transporte Metropolitano, ATM, prohibió subir en patinetes eléctricos al transporte público de Barcelona, al menos por seis meses.
Por ello, la ATM invitó a todos los operadores de transporte (tranvías, metro, autobuses, trenes de Ferrocarriles de la Generalitat y de Rodalies de Renfe), a que redacten un reglamento temporal que prohiba a los usuarios de patinetes eléctricos subir al transporte público con estos vehículos.
Si bien el objetivo es ir hacia una movilidad sostenible, prohibir estos vehículos no es el punto final.
La prohibición se dio porque se han presentado varios incidentes. Uno de ellos fue el incendio y estallido de un patinete al interior de un vagón de los Ferrocarrils de la Generalitat en la ruta Sant Boi y Molí Nou (Barcelona), el pasado 17 de noviembre.
El suceso se presentó cuando el patinete eléctrico estaba cargándose. El fuego se propagó y tres personas resultaron heridas en el interior del vagón.
Se determinó que la causa del fuego fue un problema en la batería. Por este hecho tuvieron que ser desalojados de inmediato todos los pasajeros en Sant Boi de Llobregat.
No a patinetes eléctricos al transporte público
Por su parte, Marc Sanglas, secretario general de Territorio de la Generalitat, indicó que aún no se sabe en qué momento entrará en vigor la prohibición.
De hecho, dijo que cada transporte es responsable de redactar de manera independiente la prohibición, ya que la ATM no puede hacerlo directamente.
Cuando la norma comience a regir se aplicará durante medio año. Durante este tiempo la ATM estudiará cómo introducir de manera segura estos patinetes en el transporte público.
La prohibición busca garantizar “maximizar la seguridad” para los usuarios de cada una de las modalidades de transporte.
Dentro de las soluciones de transporte multimodal, el patinete es considerado una de ellas. Incluso es fundamental dentro del concepto de movilidad sostenible.
La meta es lograr encontrar una solución adecuada lo antes posible para poder volver a subir estos vehículos a vagones y autobuses, pero garantizando total seguridad.
La Autoritat del Transport Metropolità deja constancia que estos vehículos no son peligrosos y tampoco descartan que en un futuro sea posible acceder con patinete al transporte público.
Sin embargo, lo más seguro es que se prohíba conectarlos en la red para cargarlos.
Medida por seis meses
Se espera que la medida sea máximo por seis meses. Mientras tanto, es prohibido entrar patinetes eléctricos al metro, al tren y a los autobuses.
Después de este período la ATM decidirá si los prohíbe por completo o si se logra tener una solución menos restrictiva. Lo importante es no repetir incidentes como el de Sant Boi.
